Hasta ahora se ha practicado una lectura que enfatiza en cómo el surgimiento del impresionismo supuso una reuptura radical con el arte más establecido y académico. Uno de los retos era plasmar en los lienzos la modernidad.
(La estación de Saint-Lazare, Claude Monet)
-Este cuadro, por ejemplo, representa una escena que refleja lo moderno de finales del siglo XIX. Es impresionante como el fondo de la escena queda desdibujado debido al humo de lal estación. La manera en la que están plasmadas las sombras, la intensidad de los colores...-
El impresionismo convivía con el academicismo.
Además de Goya y Velázquez, toda la escuala barroca española ejerció una enorme influencia en los artistas, impresionistas o no, que desde París propugnaron una nueva expresión plástica. En ella encontraron una pintura a`pegada a la realidad, sobria y austera, en la que se prescindía del detalle superfluo en beneficio de la pintura pura.
En torno a Manet se reúne un gruypo de jóvenes artistas con innovadoras ideas, como Pierre-Auguste Renoir, Frédéric Bazille y Claude Monet. Los lazos de amistad y compañerismo del grupo están presentas en otras obras, como El taller de Bazille, un luminoso interior que capta a los artistas en vivo, muy lejos de la austeridad.
- Este cuadro que refleja el taller del artista en una escena cotidiana, que plasma la luz que entra por la ventana dejando así un espacio luminoso que no tiene nada que ver con lo académico que mostraba fondos oscuros, negros, con una luz tenue.-
Su vitalidad como grupo fue, quizá, lo que les hizo resistir el constante ninguneo con el que les trató el arte más establecido. Una y otra vez, las obras de los impresionistas eran rechazadas en el Salón de París. Frente a ellos el Salón privilegiaba otras composiciones producto de un arte más establecido.
La técnica impresionista plasma pinceladas pequeñas y vibrantes que permiten captar el continuo devenir de los efectos atmosféricos.
Frente a la fuerza de Claude Monet, Perre-Auguste Renoir aparece como un artista más sensual, más delicado en sus retratos,quizás por las sutiles irisaciones de su paleta veneciana, que se muestran con esplendor en El columpio.
- Este cuadro es alucinante cuando estás ante él... Es de los que más me soprendió en la exposición. Cómo está plasmado el juego de luces y sombras, un cuadro tan lleno de color-
Por su parte Alfred Sisley, destaca por su gran rigor compositivo demostrado en obras como La nieve en Louveciennes o La barca durante la inundación, Port-Marly.
(La nieve en Louveciennes, Alfred Sisley)
- Para mi este pintor fue un gran descubrimiento, y sobre todo lo sorprendente de sus paisajes nevados, que no son tan fríos como se supone que sería uno de ellos.-
Frente a la renovación estilística de Monet, Renoir o Cézanne, Edgar Degas captura la del clasicismo. Su modernidad se apoya en una estética fragmentaria más que en una pincelada vibrante. Representa instantes de la vida moderna. Los hipódromos, las representaciones de ballet, las mujeres en la intimidad o los retratos de la burguesía triunfante se convierten en los asuntos principales de sus obras.
(La clase de danza, Edgar Degas)
- Este es el cuadro que más me gusto de Degas, no tanto las escenas de hípica que no me llamaron tanto la atención. Como refleja la instantaneidad, las bailarinas paradas escuchando al profesor, algunas en postura de ensayo, otras distraídas. Y el tema en sí, de las bailarinas que además es algo muy estético, y que puede dar mucho juego-
La exposición culmina con el triiunfo de Manet, que augura el de todo el movimiento al que apoyó.
- Me ha parecido una exposición excepcional, con grandes cuadros, que fueron de gran importancia para el movimiento..., y el poder estar frente a ellos que no tiene nada que ver a verlos en un libro. Cada pincelada de color llama mucho más la atención, cómo juegan con los colores, que representan el momento, el instante. Diría que ha sido una exposición imprescindible-
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